El alfabeto latino es de lejos el más extendido en el
mundo. Sus pocos caracteres han servido para crear la modalidad escrita de
muchas lenguas, algunas tan disímiles entre sí como el alemán y el quechua. El
sistema de escritura de los romanos tiene una historia amplia de difusión
consolidación como el sistema predilecto por buena parte de la población
mundial. Pero lo que conocemos hoy (estas mismas letras y puntos, comas,
mayúsculas y minúsculas) dista mucho de lo que los latinos adoptaron antes de
la consolidación de Roma como imperio y poco menos de lo que los ciudadanos
imperiales conocieron. Cada lengua que ha adoptado el alfabeto ha agregado o
excluido de él letras y símbolos. El español, por ejemplo, es famoso por su
letra ñ.
Lo que vamos ha hacer ahora es explicar parte de la
historia del alfabeto latino y hallar el valor fonético que se le atribuye a
cada una de sus letras, revisando las variantes que se tienen en este último
aspecto.
Los latinos adoptaron un sistema alfabético de
escritura (en el cual a cada fonema de la lengua hablada le corresponde, al
menos, un caracter de la escrita) luego de que los etruscos hubieran acogido y
adaptado el sistema de los griegos, quienes a su vez habían adoptado el
alfabeto de los fenicios. Entre estos ires y venires históricos el latín empezó
a escribirse en los arededores del siglo VII antes de Cristo. En principio, el
alfabeto constaba de 20 letras:
A
B C D E F G H I L M N O P Q R S T V X
Durante los siglos II y I antes de Cristo se agregaron
las letras k, y y z, además de los
dígrafos ph y th para las palabras de origen griego. Sabemos ya que los griegos
tuvieron gran influencia en la cultura latina. El alfabeto quedaba así con 23
letras:
A
B C D E F G H I K L M N O P Q R S T V X Y Z
Para el siglo XVII se agragaron los grafemas de la j y la v puesto que sus respectivos sonidos no se distinguían de manera
individual en el alfabeto. Lo que tenemos hoy, entonces, dista mucho de los que
los romanos conocieron en su día. Por ejemplo, las letras minúsculas son un
invento medieval, al que los ciudadanos del imperio no tuvieron acceso. El
alfabeto queda, en consecuencia, así:
Aa
Bb Cc Dd Ee Ff Gg Hh Ii Jj Kk Ll Mm Nn Oo Pp Qq Rr Ss Tt Uu Vv Xx Yy Zz
Ahora bien, ¿cuál era el nombre con se conocían todas
estas letras? La pronunciación de los nombres de las letras era alargada y su
nombre era:
letra
|
Nombre
|
pronunciación
|
Aa
|
a alaragada /aː/
|
|
Bb
|
bē
|
/beː/
|
Cc
|
cē
|
/ ʃeː/
|
Dd
|
dē
|
/deː/
|
Ee
|
ē
|
/eː/
|
Ff
|
ef
|
/ef/
|
Gg
|
gē
|
/ʒeː/
|
Hh
|
h
|
/xaː/
|
Ii
|
/iː/
|
|
Jj
|
iota
|
/iota/
|
Kk
|
k
|
/kaː/
|
Ll
|
el
|
/el/
|
Mm
|
em
|
/em/
|
Nn
|
en
|
/en/
|
Oo
|
/oː/
|
|
Pp
|
p
|
/peː/
|
Qq
|
q
|
/kuː/
|
Rr
|
er
|
/er/
|
Ss
|
es
|
/es/
|
Tt
|
tē
|
/teː/
|
Uu
|
/uː/
|
|
Vv
|
vetito
|
/betiːto/
|
Xx
|
ex
|
/eks/
|
Yy
|
graeca
|
/iː´greka/
|
Zz
|
zēta
|
/zeːta/
|
Para un principiante
los sonidos descritos en la columna de pronunciación pueden ser un obstáculo.
Incluimos, en este caso, las notas aclaratorias de los símbolos que hemos usado
en esta redacción. De cualquier forma, todas las dudas se resuelven con un
breve repaso del Alfabeto Fonético Internacional, que usamos en esta y en todos
los capítulos del curso.
·
/ː/ este símbolo significa alargamiento. Una
vocal seguida de estos pequeños triángulos tendrá una duración dos veces mayor
a la de una vocal sin ellos.
·
/ʃ/ la grafía representa una forma de
articulación del inicio de la palabra francesa chateau “castillo”. No tiene equivalencia en el
español. Y una descripción fonética del asunto diría que es una “fricativa
palato-alveolar sorda”.
·
/ʒ/ Sin equivalencia en español. Es una fricativa palato alveolar, igual que la anterior, pero sonora.